domingo, marzo 27, 2005

soy la morsa

7.
ya ni si quiera sé diferenciar qué hice ayer, y qué hice hoy
porque lo que hice ayer se repite con lo que hice hoy
y los acontecimientos de hoy se mezclan con los de ayer, como
una insignificante piscina llena de señales, sí.
Hoy me levanté tarde y pretendí salir a caminar sin ningún motivo aparente
y cuando llegué al teléfono público
di media vuelta y me fui.
Soy un imbésil
y sé que no me necesitas más para siempre
y que me has olvidado
(ojalá no me llames mañana más tarde
rogándome perdón)
Es igual
sobreviviré, como siempre.
Hoy en el Centro Comercial tuve una iluminación
me di conque mi cabello largo y mi barba de hace unos
cuatro meses no logran confundirme con los demás
porque soy invisible.
Me explico:
no interesa si caigo en la cuenta de que
soy un huevón,
porque estas tiendas que en algún momento de mi vida odié
no interesan, en lo más mínimo.
Yo soy el hombre-antena que
todo lo capta, todo lo ve
yo soy
el buscador de ilusiones y sentimientos que encuentra
la Nada Central de las Cosas -el Cien Por Ciento de Nada-
Y aunque me pregunte una y otra vez
dónde estás, dónde te haz metido -por qué no estás aquí conmigo-
No importará, yo soy la morsa
soy el que escribe.